viernes, 7 de noviembre de 2008

Malas noticias... ¿Y ahora qué?

Todos, en algún momento de nuestras vidas nos hemos visto rodeados de problemas... Es parte del diario vivir el encontrarnos con problemas.


¿Qué es una adversidad?

Comúnmente escuchamos frases como: "Esto es muy difícil", "Me sale todo mal", "Todo se ha puesto en mi contra", etc, etc. A estas cosas, los hombres y mujeres comunes de nuestro tiempo, le llaman adversidad.

El concepto de adversidad, según las personas que no son capaces de liderarlas es: "Período negro en el cual las cosas salen mal".


¿Cómo ve un líder las adversidades?

Esta es una pregunta que debemos plantearnos...

El líder tiene la capacidad de ver las adversidades desde otro punto de vista. El líder puede dar, de esta forma, varios conceptos y formas de ver la adversidad...

Adversidad: Diminuto espacio que divide a dos grandes momentos de prosperidad.
Obstáculos en el camino que ayudan a caminar más a prisa.
Momento de aprender que no todo lo tengo dominado.
Instante en que me demuestro a mi mismo y a los demás, que mi vida es perfecta.
Momento de valorar lo que tienes.

Entonces se podría comprender, desde esta perspectiva las actitudes de un líder y de una persona que no lo es, cuando viene una adversidad...

Muchos dicen que los problemas llegan a la persona... El líder es capaz de decir que los problemas salen de la persona...

Esta frase significa que todas las adversidades, dificultades y problemas de nuestra vida, son, en mayor o menor grado, causados por el ser humano.

Cuando llegas a comprender esto, nunca más te dirás a ti mismo que tienes mala suerte...



"La suerte es para los cobardes, el aceptar los errores es de guerreros"
La pregunta que debes hacerte en este instante es: ¿Cómo veo yo la adversidad? Luego de responderte esta pregunta debes hacerte, inmediatamente la siguiente: ¿Qué puedo hacer, ahora, para no ver nunca más la adversidad como un freno, sino como un impulso?
Te ayudaré un poco con eso en el siguiente artículo,
Por un cambio positivo en el mundo,
Daniel Juez Mendoza
P.D. Deja tu comentario, con las preguntas e inquietudes que tengas. Estaré dispuesto a responder, también te sugiero que te suscribas al blog, en esta misma página al inicio, columna izquierda. Recibirás un correo electrónico cada vez que publique algo nuevo

martes, 5 de febrero de 2008

Winston Churchill - La falla de nuestra época consiste en que sus hombres no quieren ser útiles sino importantes.


Sir Winston Leonard Spencer Churchill

A lo largo de su carrera, Winston Churchill fue, en repetidas ocasiones, el hombre más criticado y el más popular en Inglaterra, y muchas veces, sucedían las dos al mismo tiempo. Fue considerado por muchos como el último de los grandes estadistas. Además de ser recordado por ser un gran estadista, también es reconocido por una sorprendente habilidad para predecir acontecimientos futuros, como sucedió en la I Guerra Mundial, lo que en ocasiones se convirtió en una carga para los ingleses.

Durante años, Churchill fue un gran líder, un hombre que daba grandes dosis de energía y valor. Destacado como biógrafo, orador, político (donde se inmortalizó), historiador, corresponsal de guerra y bebedor de coñac. También se destacó como albañil, novelista, pintor, soldado, aviador, jugador de polo y propietario de caballerías.

Vivió en el palacio de Blenheim, que era propiedad de su abuelo, duque de Marlborough. Su padre era lord Randolph Churchill y su madre una bella norteamericana, Jennie Jerome. En su autobiografía evoca con ternura los días pasados bajo la protección de su madre. Quizás por eso, cuando su padre lo internó en un costoso colegio , reaccionó con rebeldía; estar lejos del hogar le resultaba insoportable, y expresó su protesta al oponerse a cualquier cosa que significare estudiar. Frecuentemente lo reprendían y lo castigaban, mientras que sus calificaciones eran las peores. Uno de sus profesores hablaba así de él: "No era un muchacho fácil de manejar. Cierto que su inteligencia era brillante, pero sólo estudiaba cuando quería y con los profesores que merecían su aprobación."

Ya en el Parlamento, sus discursos y su buen humor se hicieron famosos. Su espíritu independiente, reacio a someterse a disciplinas partidarias, provocó que se ganara enemigos gratuitamente en la cámara, incluso entre sus propios correligionarios. Cambió varias veces de partido y sus intervenciones generaban la mayoría de las veces grandes polémicas.

Churchill previó de una forma extraordinaria y exacta los acontecimientos previos a la I Guerra Mundial, los mismos que la desencadenarion y los detalles que ocurrieron durante la primera etapa de la contienda. Los militares se burlaban de sus profecías, calificándolas de disparatadas, pero sorprendieron a todos cuando se convirtieron en realidad y lograron que Winston se inmortalizara en las páginas de la historia por su precisa clarividencia.

Fue galardonado con el Premio Nobel de Literatura por sus Memorias sobre la Segunda Guerra Mundial. Por razones de edad renunció a su cargo en 1955, después de ser nombrado Caballero de la Jarretera por la reina Isabel II y de rechazar un título nobiliario para de esta forma permanecer como diputado en la Cámara de los Comunes.

Luego de retirarse, su figura siguió siendo importante y vital sobre la vida política de Inglaterra y los que gobernarían luego este país, siempre buscaban a Sir Winston Churchill para obtener consejos.

Falleció el 24 de enero de 1965, en la ciudad de Londres, pero nos dejó a todos nosotros grandes virtudes que imitar, cualidades que aplicar, y sobre todo, un liderazgo impresionante que nunca se debe olvidar.

"La falla de nuestra época consiste en que sus hombres no quieren ser útiles sino importantes."

Winston Churchill se caracterizó por su gran espíritu de líder, que hacía que el pueblo y quienes se encontraban en los altos puestos de Inglaterra lo admiraran. Fue un hombre inquebrantable, y fue el responsable de que el Reino Unido no perdiera su poderío, ni se viera gravemente afectado por los efectos de las Guerras Mundiales. Es considerado por muchas personas, como el más grande líder que ha habido en el Reino Unido.

¿Qué virtudes puedes extraer de este gran personaje? ¿Qué cosas de Winston Churchill te han llenado de admiración? Sin duda alguna el liderazgo de este hombre ha influido sobre muchos en nuestro tiempo...

Una pregunta que me hice constantemente a mi mismo fue, ¿Por qué poner a Winston Churchill como el último personaje? Uno de los argumentos en los que me he basado es que, durante la época de las guerras mundiales, la mayoría de las potencias que participaron en la guerra fueron realmente devastados, incluyendo las grandes potencias, influyendo en la economía mundial, y en el bienestar de cada país. Todos los países se vieron afectados, directa o indirectamente, por este mal que aborrezco. Pero Inglaterra no. ¿Por qué? Bueno, no creo que haya sido coincidencia, creo que Winston Churchill sabía algo, tenía presente algo que los demás mandatarios olvidaban, y era que nuestro futuro depende de lo que hagamos. Muy bien lo ilustró en la frase célebre que he colocado, y estoy completamente seguro de que tiene la razón.

La mayoría de los seres humanos desean ser hombres y mujeres importantes, no útiles, y eso es lo que hace que muchos hombres y mujeres no sean ninguna de las dos cosas; de esta forma, el mundo entero tiene una superpoblación de inútiles y nada importantes.

Reflexionemos un poco más a fondo de la verdad de esta frase. Recordemos a un mandatario actual de un país (pon aquí el nombre del mandatario que más te moleste ver) que desea ser importante, mas no útil, realiza una serie de actividades buscando la aprobación de su pueblo. Según lo que has aprendido a lo largo del estudio de los personajes, ¿Es eso liderazgo? ¿Así es como se comporta un líder? Definitivamente no.

Algo más, este mandatario, buscará llamar la atención, de cualquier modo, para poder aumentar su popularidad. Esto tampoco refleja cualidades de líder. Aún cuando este hombre busque ser importante, nadie necesitará de él, si hay un líder que pueda reemplazarlo... Nunca llegará a ser útil, tampoco será importante... Simplemente será nadie, alguien que traerá ruinas y dolor a quienes están debajo suyo...

Compara al mandatario de este ejemplo contigo... ¿Hay algo de lo que he dicho que tú harías? Puede ser que sí, trata de no sólo ver, sino también analizar qué cosas debes mejorar.

Una de las cualidades más importantes que tuvieron los líderes de los que hemos hablado, es la maravillosa virtud de la acción. Todos de quienes hemos hablado han actuado, han luchado, han dado su vida (que no es lo mismo que morir por una causa) por ser líderes y lograr sus objetivos.

La acción, la más importante de las virtudes, debe estar presente en la vida de todo líder. Un líder no espera a que las cosas sucedan, el líder hace que las cosas sucedan. Quisiera agradecerte por haber seguido de cerca todas estas lecturas, y ahora que, estás un poco mejor preparado para liderar, espero que empieces actuar, y que no te dediques sólo a leer.

Por un cambio positivo en el mundo,

Daniel Juez Mendoza

Volver al inicio

lunes, 4 de febrero de 2008

A quemar las naves - Alejandro Magno

Alejandro Magno

Alejandro III de Macedonia, fue rey desde los 20 años hasta el día de su muerte. Muchas veces se ha hablado de este controversial personaje, unos dicen que es digno de admiración, otros lo toman como alguien que hizo mucho daño y no es digno de seguir como ejemplo. Para ser sincero, yo lo tomo como un líder, bueno o malo, pero fue un líder.

¿Quién es capaz de conquistar el Persia, Anatolia, Fenicia, Gaza, Siria, Egipto, Mesopotamia, Judea y muchas regiones más, ampliando las fronteras de su propio imperio sin motivar a sus soldados? Una de sus grandes cualidades era su visión... ¿Qué tenía la visión de Alejandro Magno? Bueno, nunca se quedaba estático, siempre quería más. Eso se debe a una educación excelente de uno de los grandes maestros de toda la humanidad: Aristóteles. Este gran pensador griego hizo de Alejandro un ser con ansias de trascender, de romper todas las barreras.

Alejandro emprendió un viaje al este para encontrar el fin del mundo, puesto que Aristóteles le contó historias sobre el fin del mundo, lugar donde terminaba la Tierra. Cuando Alejandro escuchaba estas historias simplemente en su mente se imaginaba y se visualizaba en la conquista de el mundo entero.

Si bien es cierto no es el mejor ejemplo de ética, moral y paz. Pero Alejandro realmente buscaba cumplir SUS IDEALES, así como tú estás buscando que tus sueños se cumplan.

Se dice que en una de sus conquistas, para motivar a sus hombres, ya cansados, quemó todas sus naves, en las que había cruzado el mar, y al dejarlos sin retorno, la única forma de sobrevivir era venciendo, y acobardarse ya no era una opción. ¿Y eso que tiene que ver contigo? Bueno pues, es simple, deja tus seguridades, quema tus naves ¿Qué es lo que aún te tiene atado? ¿Qué es lo que aún hace que acobardarse sea una opción para ti?

Ahora, hay que aclarar un aspecto importante, que Alejandro lo descubrió al final de sus días. Cuando el ya no tenía nada más que conquistar, porque había conquistado el mundo entero, se frustró, entristeció por completo. Alejandro conquistó todo, menos lo que realmente quería conquistar, su propia felicidad.

Y es que hay que darnos cuenta de que la felicidad no es algo que debemos buscar con ahínco en el poder, en las cosas materiales, o en el reconocimiento vano y absurdo de los demás. La felicidad es el estado de satisfacción con la propia realidad del ser humano. Alejandro no lo descubrió, porque estaba demasiado ocupado conquistando.

Espero que, quemando tus naves (esas falsas seguridades que te hacen vivir en la mentira, creyendo que todo está bien en tu vida) puedas alcanzar esa felicidad que no la encontrarás en cualquier lugar, sino conquistándote a ti mismo.


"...Ninguna fortaleza es tan inexpugnable que no puede entrar en ella un mulo cargado de oro..."

En la próxima edición

Compartiré un poco sobre la vida de Sir Winston Churchill, personaje clave en la historia; y uno de los grandes líderes en el siglo XX.

Por un cambio positivo en el mundo,

Daniel Juez Mendoza

Volver al inicio